LA PAREJA IDEAL...

NO EXISTE.

De ninguna combinaciòn entre los sexos que puedan existir.

Y no es razón de tristeza, tampoco de decepción.

La cuestión de la vida en pareja se refiere a dos personas que comparten un espacio, varias actividades y alguna intimidad física la una con la otra.

La vida en pareja es una alternativa voluntaria a la vida a solas o con familia por un período de tiempo.

La vida en pareja es una serie de eventos que nos fortalecen y enseñan sobre la naturaleza humana, sus virtudes, sus defectos, nos permite desarrollar la paciencia, la tolerancia, la generosidad, el sacrificio y el trabajo en equipo.

Es también una oportunidad de conocer aspectos de una misma que desconocíamos o pretendíamos no saber. A través de la otra persona vemos nuestros defectos, cualidades, hábitos buenos y malos, actitudes constructivas o destructivas, nos visualizamos en lo físico y en lo espiritual.

La vida en pareja puede ser una oportunidad para crecer y mejorar, o simplemente vegetar y aguantar.

Vivir en pareja es una opción, no una obligación. Por lo tanto no debería de verse en un momento determinado como un evento desafortunado.

En una relación, la navegación de la misma se distribuye entre marea alta y baja, tormentas, turbulencia, sol intenso, calor, frío, viento huracanado y tranquilidad que esboza aburrimiento y entrar a lo habitual.

Es un viaje, que será tan bello o desastroso como la tripulación decida que sea. Puede ser muy largo, corto y en un par de travesía terminar. Bajarse del barco es también opcional, lo sabio sería al llegar al puerto y no en alta mar. Mas el golpe de caer en agua o en tierra, al final duele igual.

Miro a mí alrededor y veo parejas nuevas, parejas viejas y parejas deshechas. Pero parejas perfectas, ninguna, por más que la imaginación quiera, no las hay.

Qué tanto queremos que nuestra vida sea perfecta, que nuestra relación también lo sea y al no lograr lo que desde un principio era imposible, nos frustramos o desesperamos y loqueamos. No saber que se quiere puede ser un detalle que hace la total diferencia, paraíso, infierno o simplemente así como es la vida cotidiana sobre este planeta.

Lo que queremos es complicado, cambia, nos confunde y paramos sin saber que querer o no querer. Hoy no quiero lo que hace diez años, o lo que hace un mes y menos puedo imaginar lo que dentro de un tiempo a venir.

Queremos a veces lo que nos complace, otras lo que nos duele, lo que nos enloquece, puede ser que para bien o para mal. Porque la locura puede o no ser una cura…al dolor, a la soledad, al miedo de no tener a nadie a la par.

El inicio es tan intenso y tan incierto como el fin, tanto hay de dudas al inicio, sobre la otra persona, como al final de una misma. Se goza, se padece, se aprovecha, se sufre, se desea y se odia. Es una sola caja de pandora. Lo que resulta o salga, al final puede ser o no lo que supusimos, algo mejor o peor. Pero de eso se trata esta aventura de vivir en compañía, de desnudarnos en cuerpo y alma ante otra persona, de despojarnos de nuestros escudos y armas, quedando expuestas, desvalidas y propensas a cualquier eventualidad.

Amigas mías en pareja o no, mis amigas son. Lo que más deseo es que haya paz en su interior y sepan, que pase lo que pase, la vida sigue y el dolor poco a poco, se desvanece y el olvido sustituye a la angustia de cualquier separación.

No perder la identidad, de lo que sea, en compañía o en soledad. Al menos tener en cuenta quienes hemos sido y somos, para algo de equilibrio lograr. Nada ni nadie sostiene a la persona tras una pérdida amorosa, como la propia persona en soledad.

Muchas hemos pasado por esta homilía, una o varias veces y todavía podemos sentir esa garra de desesperación que nos oprimía sin tregua y con crueldad nuestro corazón. Muchas hemos sentido qué es perder, perder, pero también ganar y ganar. Depende del momento, depende de tantas cosas que poder predecir un desenlace es tan inútil como asegurar la victoria en un juego de azar.

Relaciones, parejas perfectas, en conclusión, no las hay.

Un enlace certero que quisiera compartir.

http://www.jacqklex.com.ar/blog/2010/03/una-forma-de-elegir-y-mantener.html