viernes, 2 de noviembre de 2007

GUIA PADRES DE HIJOS HOMOSEXUALES PARTE 2

EN BUSCA DEL ROL PROPIO.ACEPTARSE, SENTIRSE BIEN
Las personas se sienten bien cuando están en armonía consigo mismas y con su medio ambiente, y cuando tienen alguna cosa en común con otras y algunas otras cosas sólo con las personas de su confianza. Y cuando poseen algunas características propias que las destacan como personalidades inconfundibles.
Este es el sentimiento básico de "quererse a sí mismo", estando en armonía consigo mismo y con el propio mundo.
Sentimientos internos y expectativas externas
El sentimiento de autoestima y la conciencia individual están compuestos de partes diferentes. Son modificadas por las experiencias, con la evaluación crítica de las mismas y por el modo en que pueden ser relacionadas las necesidades, los sentimientos y pensamientos con las expectativas y presiones externas.
Cuando surgen problemas, el equilibrio personal logrado tambalea. Algunas veces sólo transitoria y superficialmente, pero, muchas veces, también a largo plazo y profundamente.
Las imágenes de los roles logran, a veces, un desarrollo transitorio, a veces permanente y profundo.



Cada persona es diferente
La formación de la imagen de los roles y el desarrollo de la orientación sexual, sería totalmente distinto de persona a persona:
Hay mujeres adolescentes que se acercan a los varones y expresan activamente sus deseos sexuales, asustándolos a veces.
Otras mujeres prefieren dejarse conquistar, aceptando los requerimientos de los varones.
Algunos varones sólo se sienten valorados cuando se muestran fuertes, activos y potentes, y las mujeres aprecian justamente esas cualidades.
Otros varones le dan más importancia al aprecio, la confianza y al amor, antes de querer tener relaciones sexuales.
Algunos varones están verdaderamente enamorados entre sí, tienen ansias de estar cerca el uno del otro y disfrutar su proximidad corporal sin sentir excitación sexual y concretar el deseo.
Las mujeres adolescentes, frecuentemente, mantienen amistades íntimas, cariñosas, entre sí, guardan secretos y comparten todo lo que es importante para ellas, sin sentir excitación física.
Algunos, conscientemente, se atreven a tener contactos corporales excitantes hacia mujeres y varones, pero sin comprometerse.
Cada vez más varones y mujeres con sentimientos y deseos homosexuales aceptan su sexualidad ante sí mismos y su entorno. Muchos buscan conscientemente grupos de amigos de igual idiosincrasia, que apoyen su identidad. Muchas veces se designan a sí mismos como "gays" y "lesbianas" para demostrar que no se avergüenzan de sus sentimientos.
Algunos jóvenes no saben muy bien hacia quienes se sienten más atraídos y se prueban a sí mismos. No siempre esto es consciente. Por eso muchos luchan y esconden sus impulsos homosexuales e, incluso, se distancian de otros homosexuales que se aceptan abiertamente, por temor al rechazo de los padres, los maestros y amigos.
Muchos varones y mujeres suelen ser activos, o pasivos, o románticamente cariñosos, a veces provocativamente sensuales, de acuerdo a como se sientan y según lo permitido por la situación.
Todo tiende a armonizar los propios sentimientos, deseos y la concepción de valores, con las expectativas de los demás y las posibilidades de cada situación. "Ser distinto", entonces, significaría "decepcionar" las expectativas del grupo para estar más cerca de sí mismo.Apartarse de la norma puede ser doloroso
Esto no se logra sin discusiones, búsquedas y experiencias dolorosas, pero, en el presente, la situación es asumida en forma más consciente y con mayor responsabilidad. Y, sobre todo, admitiendo la diversidad de la vida: pues la vida, determinada biológica, anímica, social y materialmente, es femenina y masculina, hetero-, bi- y homosexual, joven y vieja, plena o restringida, y muchas otras cosas más.
Respeto por la vida significa respeto por la dignidad, así como por la expresión corporal y espiritual de cada ser.
Múltiples necesidades - ¿pero un solo camino preestablecido?
A pesar de la diversidad de la sexualidad, en nuestra sociedad existe un "camino principal deseado" que determinaría el desarrollo de la sexualidad.
Los niños pequeños juegan al papá y a la mamá. El círculo de amistades y conocidos está compuesto por parejas heterosexuales o personas solteras que no han conseguido pareja o no están interesadas en convivir con alguien en forma permanente, quienes -así escuchan los niños de sus padres- quizás, ocultamente, sean gays o lesbianas. En la publicidad siempre se besan varones y mujeres, porque, por ejemplo, un perfume ejerce un efecto muy atractivo. "Elisa ama a Juan" gritan los niños del jardín de infantes, bromeando. Pero que Juan pueda amar a Guillermo, no les cabe en el pensamiento. Y, en la escuela, advierten que pueden molestar mucho más a alguien si, siendo niña, le adjudican un romance con otra niña, o, siendo varón, con otro varón.
"Esto ya pasará..."
Los juegos sexuales, habituales entre los varones, son prohibidos por los adultos o considerados como una fase pasajera. "Esto ya pasará", pues, naturalmente, pronto el sexo opuesto será más interesante. Si una adolescente de 16 años aún no tiene un amigo, podría significar que no sea atractiva, que sea una emancipada o, quizás, sea lesbiana, y entonces es dejada de lado. Los varones necesitan de las amistades de las mujeres para comprobar su propio atractivo e importancia.
Los libros escolares siempre tratan de familias "intactas" y, últimamente, también de familias de un solo padre. Pero nunca en las familias conviven como pareja dos mujeres o dos varones. Las novelas de amor tratan de la pasión y la separación de parejas heterosexuales. Los padres se ponen nerviosos cuando su hijo de 17 años aún no trae a casa una amiga. Los vendedores de sistemas de ahorro para la vivienda prometen un futuro feliz en la casa propia a la familia con hijos.
En la enseñanza de la sexualidad son tratados casi exclusivamente los aspectos biológicos de las relaciones heterosexuales y la prevención del embarazo. La homosexualidad aparece, solamente, si es que lo hace, como una forma singular, que naturalmente debe ser respetada.
El camino preestablecido es la heterosexualidad


La homosexualidad, a menudo, es valorada negativamente
Las señales que reciben las niñas, los niños y las personas jóvenes en el transcurso de su desarrollo puntualizan el amor heterosexual. Ser gay o lesbiana es silenciado o, generalmente, valorado negativamente. Esto provoca una inmensa presión, que desde afuera, es imposible evaluar, y muchas veces provoca que la persona fiel a sus inclinaciones se sienta "desviada" y con necesidad de justificarse. No es asombroso que sólo pocos lo logran. La mayoría trata de eludir la presión y adaptarse a cualquier precio. Y esto puede ser un precio muy alto: amistades deshonestas, doble vida, soledad, hasta llegar al pensamiento del suicidio.
¿CUÁNTAS PERSONAS SE COMPORTAN HETERO- U HOMOSEXUALMENTE?
Las investigaciones muestran que, hasta la edad de 15 años, un 30% se comporta parcialmente en forma homosexual y un 10% en forma exclusivamente homosexual. Hasta los 25 años estas cifras se dividen aproximadamente por la mitad, es decir, un 17% que ocasionalmente se comporta en forma homosexual y un 3% que se comporta en forma exclusivamente homosexual.
¡Naturalmente masculino! - ¡ Naturalmente femenino!
La atribución unilateral de cualidades masculinas a los varones y femeninas a las mujeres, obstaculiza el pleno desarrollo de sus posibilidades para vivir sus roles sexuales en forma satisfactoria y sana. Son bloqueados sus sentimientos y deseos de relación, la comprensión, el encuentro personal informal, no sólo entre varones y mujeres, sino también de varones entre sí y mujeres entre sí. Esto incluye mostrar los sentimientos ante el otro, tener encuentros cariñosos, disfrutar del contacto corporal, compenetrarse de las necesidades del amigo y darse fuerza y consuelo recíprocamente.
Sin embargo, muchas de estas formas de comportamiento importantes para el bienestar personal, desconciertan cuando las muestran los varones. Pues esas características sólo serían propias de las mujeres o los varones gay. La desvalorización de los varones homosexuales estaría vinculada al miedo del varón a que, como tal, también puede ser pasivo, receptivo, sensible, cariñoso. Los varones serían despreciados por sus compañeros si se comportasen de forma "típicamente femenina".
En cambio a las mujeres lesbianas se les atribuye propiedades "típicamente masculinas": son frías, rigurosas, poco eróticas y severas. El rechazo y la desvalorización de las mujeres lesbianas estaría en relación con un comportamiento evaluado como "poco femenino".
Estos rígidos prejuicios desvalorizantes provocan que los gays que se comportan en el sentido tradicional de la masculinidad, y las lesbianas que se amoldan al rol femenino, generalmente no se reconocen como tales.
"M., 20 años, constató que la gente heterosexual solamente reconoce a las lesbianas cuando se presentan 'así', masculinas, hipotéticamente frías. Si usan cabello largo o zapatos con tacos altos, los heterosexuales nunca las relacionarían con lesbianas. Las lesbianas que se muestran 'así', o sea con ese modo masculino, frío, son las que se reconocen como tales, y, yo creo, ni siquiera son la mayoría."(Lesbianas - Cuando mujeres aman a mujeres - Folleto Berlín 1991, pág. 40)
Los estereotipos usuales de "gay fundamentalmente femenino" y "lesbiana fundamentalmente masculina" son, por lo tanto, productos del prejuicio y el miedo a la desviación de los roles usuales, más que de la experiencia con la realidad de vida de las personas que aman a personas de su mismo sexo.

CONTINUA LA PARTE 3

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Acerca de mí

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Guatemala
Buscando respuestas, busco opciones, busco opiniones, busco saber y aprender.Simplemente, no cumplo con ninguna regla, espectativa, predicciòn o definiciòn.

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"La búsqueda de dios es una ocupación inútil, pues no hay nada que buscar donde nada existe. A los dioses no se les busca, se les crea..." Maximo Gorki

UNA DE TANTAS CONCLUSIONES...

"Cuando practicamos Zen, vemos que el dolor no es malo. Simplemente es dolor. Si nos pasamos la vida huyendo de momentos dolorosos, le cerramos la puerta a muchas cosas que de lo que la vida nos trae, tanto el dolor como la alegría. No podemos llorar cuando estamos tristes, ni podemos reir cuando estamos felices. Cuando evitamos el dolor y peleamos para no sentirlo, el dolor se convierte en sufrimiento.
Hay una enorme diferencia entre dolor y sufrimiento. El dolor con frecuencia no puede ser evitado, pero el sufrimiento si. Al aprender las diferencias entre ambos, muchos temores desaparecen."
Brenda Shoshanna.

"Gender, along with race, class, ethnicity, and age, is one of the most profound social status determinants in our society--
Gender is just not what I care about or even really notice in a sexual partner--I judge each person as an individual--I have categories, but gender isn´t one of them. I´m erotically attracted to intelligent people, to people with a kind of sleazy, sexy come-on, to eccentrics."
Jane Litwoman


“Nuestro temor a lo que sea que lo cause, se origina de nuestra ignorancia y se manifiesta a través de nuestras inseguridades. Reaccionamos con fobias, rechazo y ataque, según nosotros para defendernos de los fantasmas de nuestra mente...cuando estos temores son tan sólo engaños y nos volvemos sus indefensos esclavos.”


CABALASISOY

PERSONA SUPER ESPECIALES

Lecturas recomendadas

  • A Concise History of Euthanasia: Life, Death, God and Medicine by Ian Dowbiggin
  • A Forest of Kings by Friedel, Schele
  • A Short History of guatemala by Ralph Lee
  • All Women are Healers by Diane Stein
  • Bi Any other Name edited by L. Hutchins and L. Kaahumanu
  • Blood and Guts by Richard Hollingham
  • Body Work: A V.I. Warshawski Novel by Sara Paretsky
  • Brother Iron, Sister Steel: A Bodybuilder's Book by Dave Draper
  • Chronicle of the Maya Kings and Queens by Martin, Grube
  • Cure by Robin Cook
  • Dying with Confidence by Anyen Rinpoche
  • Fearless by Brenda Shoshanna ,PhD
  • Happiness is an Inside Job
  • History of Medicine by Jacalyn Duffin
  • How to be Sick by Toni Bernhard
  • Human Remains by Helen MacDonald
  • Ice Cold by Tess Gerritsen
  • If the Buddha Dated by Charlotte Kasl
  • If the Buddha Got Stuck by charlotte Kasl Ph. D.
  • In the Land of Invisible Women by Qanta A. Ahmed, MD
  • It`s Easier Than You Think by Sylvia Boorstein
  • Joe Weider's Ultimate Bodybuilding Joe Weider's Ultimate Bodybuilding by Joe Weider, Bill Reynolds
  • Kate Daniels Series by Ilona Andrews
  • Lesbian Couples by Merilee Clunis, PhD; Dorsey Green, PhD.
  • Medical Firsts by Robert E. Adler
  • Medicine Women by Elisabeth Brooke
  • Medicine Women, Curanderas and Women Doctors by Perrone, et al.
  • Mercy Thompson, Series by Patricia Briggs
  • One year to a Life of Writing by Susan M: Tiberghien
  • Pay Attention by Sylvia Boorstein
  • Pioneer Doctor by Mari Grana
  • Practicing Peace in Times of War by Pema Chodron
  • Sastun by Rosita Arvigo, et al.
  • Stiff by Mary Roach
  • That`s Funny by Sylvia Boorstein
  • The Code of Kings by Linda Schele, et al
  • The Disappearing Spoon by Sam Kean
  • The Excellent Dr. Blackwell by Julia Boyd
  • The Girl Who Played with Fire by Stieg Larsson
  • The Girl with the Dragon Tattoo by Stieg Larsson
  • The Gost Map by Steven Johnson
  • The Knive Man by Wendy Moore
  • The Middle Ages by Morris Bishop
  • The Mists of Avalon by Marion Zimmer B.
  • The Plague Tales by Ann Benson
  • The Scalpel and the Silver Bear by Alvord, Cohen
  • The Woman in the Shaman`s Body by B. Tedlock
  • Virals by Kathy Reichs
  • Western Medicine by Irvine Loundon
  • Witches, Midwives and Nurses by Ehrenreich and English
  • Woman as Healer by Jeanne Achtberg
  • Woman Who Glows in the Dark by Elena Avila, et al.
  • Women Healers by Elisabeth Brooke
  • Women Physicians and the Culture of Medicine by More et al
  • Writing Down the Bones by Natalie Goldberg
  • Zen Miracles by Brenda Shoshanna Ph. D.